
Si bien un contrato inteligente es un contrato automatizable y ejecutable, automatizable por una computadora o sistema y ejecutable mediante la aplicación legal de derechos y obligaciones o a través de la integración de código informático, pueden darse casos en que este proceso sea de forma parcial híbrida. Para algunos contratos y transacciones, este enfoque híbrido puede ser inevitable para garantizar la solidez contractual y el reflejo adecuado de la intención comercial. Esto significa que, cuando sea relevante, este proceso parcial híbrido podrá facilitar y registrar el cumplimiento fuera de la cadena (o el incumplimiento y cualquier solución relevante) como parte del contrato inteligente y el flujo contractual.